27 feb 2009

Carretera

Hay algo especial en ese momento en el que uno logra entender todo después de un terrible momento de confusión. Aquella cálida mano me agarraba y mientras miraba sus ojos negros entendiendo mi destino, la eternidad delante de mi, un carro pasaba a mi lado a gran velocidad y una sonrisa surgió de esa cara, pero ya no asusta, ya no tengo miedo.

Pero déjame te cuento desde un principio, para que entiendas mejor mi querida dama.

Era una noche como esta, de luna delgada y una hermosa estrella a su lado, una madrugada fría y sola, como las que suelen suceder en la carretera de Barranquilla a Puerto Colombia, ya no recuerdo que hacia en aquel pueblo de viejas glorias y muchos olvidos, me dirigía a la siempre vibrante Arenosa, una ciudad que incluso hoy siento vibrar llena de vida, que incluso en el momento mas frio de mi vida la siento calentar, pero en el momento solo pensaba en que mi única compañía era mi tristeza, que mi único sentimiento era de soledad, así que no recordaba aquellas viejas leyendas que el desarrollo nos hizo olvidar, yo de repente estaba a punto de estrellarme con una.

A 100 kilómetros por hora vi una figura vestida de blanco en el camino, no la podía distinguir pero la imagen era extraña, parecía rodeada de una bruma y aun estaba algo lejos, pero al irme acercando pude distinguirla algo mejor, una mujer vestida de novia al lado del camino levanto la mano como pidiendo que me detuviera, un rostro inexpresivo que apenas pude alcanzar a distinguir me aterro e hizo que a mi memoria volviera esos viejos cuentos de miedo que me contaban de niño, el cuento de aquella mujer que en esa misma carretera se mato en un accidente de transito en la noche de su boda, una mártir que nunca pudo consumar su amor y murió sin lograr la felicidad que creía que empezaba a tener esa noche, dicen que era una mujer de infeliz vida que conoció al hombre perfecto, pero que el destino le quito todo, incluso su vida, incluso su descanso eterno, en ese momento… así que cerré los ojos y acelere.

Cuando los volví a abrir ya no estaba, la había pasado de largo y aun con miedo, trate de subirle al radio, trate de buscar un cigarrillo aunque había dejado de fumar, apague el aire acondicionado y abrí la ventana, necesitaba aire, pero nada hice, porque un frio extraño, un terror que nunca había sentido me empezó a llenar, recordé el viejo mito urbano completo y con la sensación inevitable de saber que el peor de tus temores se hace realidad mire el espejo retrovisor.

Aquella piel blanca, aquella mirada inexpresiva, pero mas que todo esos ojos negros llenos de nada, llenos de muerte, llenos de la ausencia de todo, llenos de un descanso nunca alcanzado y una venganza fría y eterna. Todo eso me impresiono, pero mas aun cuando vi que su mano se estiro para tocarme, mi corazón latió una, dos y tres veces, pensé que iba a explotar, pero no lo hizo porque alcance a sentir ese toque frio y espantoso justo antes de estrellarme contra aquel poste de frente.

Perdida total seguramente dijo el seguro del carro, no recuerdo en realidad sentir dolor, no recuerdo haber sentido nada aparte de que el frio de su toque me lleno y el mundo cambio, vi ausente cuando llego la policía, vi ausente mi madre llorando, en realidad no la podía entender, porque en mi corazón frio, si es que tengo, no existe ese sentimiento de dolor de la perdida de alguien en manos de la muerte, en realidad no existe nada, si no ella.

Su piel ya no es blanca de muerte, si no llena de vida, su expresión me llena, sus ojos negros nunca han podido ser mas cálidos, allí en la carretera, allí bajo aquellas noches frías la acompaño a buscar una venganza que ya no importa entender, la venganza de buscar la falta de felicidad, de buscar el amor en la muerte, o mas allá de ella.

Por eso bella dama, estoy en tu carro, no te asustes, solo acelera, el poste se acerca.

6 feb 2009

Sobre "Nighthawks" (los trasnochadores) de Edward Hopper

Sobre "Nighthawks" (los trasnochadores) de Edward Hopper. No alcanzan a ser historias, pero algo sugerirán.



Con las manos en los bolsillos arrastraba sus pies bajo la noche. Hoy no se detendría en 'Phillies' aunque sabía que allí podría encontrar una charla agradable hasta el amanecer. Cambiaría de acera y pasaría de largo aunque la luz del café daba luz a la esquina completa y, de cara a la calle, Joe podría verlo. Saludaría con la mano en alto y seguiría su camino a ningún lado.

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Los tres conversaban animadamente. Parecían ser conocidos de hace tiempo. En la barra yo les escuchaba sus historias e imaginaba los personajes que nombraban. Me causó gran intriga una tal Susan.

2 feb 2009

Oniricum


De pronto Chía se percató de la belleza de Julieta. Una hermosa muchacha que deambulaba por las noches en el pantano. Cabellos negros que llegaban a las caderas. No eran lisos, ni tampoco crespos, pero su forma recordaba la sensación que produce una ráfaga de viento cálido en el mar. También notó la diosa que sus ojos parecían de un animal. Óvalos que terminaban puntiagudamente y que estaban ubicados con un ángulo especialmente armónico con su nariz, que parecía de otra tierra. O al menos eso se decía. Su piel blanca era el delirio de todos los hombres. Algunas veces Chía notaba como la miraban. Algunas mujeres la miraban con envidia y algunos hombres con lujuria. Ella también sentía envidia. Pero sentía envidia de no poder tocar la piel de Julieta.

Julieta caminaba en el pantano de don Diego de Vargas. Era tarde y Chía se veía inmensa y rojiza. Un fenómeno poco usual por esas tierras. Cualquiera que la hubiera visto me entendería si le digo que parecía una vieja comadrona que chismoseaba las andanzas de todos los mortales sobre la tierra. El problema es que Chía no tenía comadres con las cuales intercambiar los cotilleos que veía que las mujeres en la tierra compartían. Destino triste para alguien que todo lo ve.

La verdad es que la falta de adjetivos que describan precisamente la hermosura de la joven Julieta, impiden un adecuado relato de lo sucedido. Apelo a sus recuerdos para que piensen en esa sensación que produce ver por primera vez a una mujer de aquellas que con solo dirigir una mirada a nosotros, nos hacen sentir completamente impotentes y abrumados. Nos hacen sentir indefensos como un niño, pero valientes como un guerrero medieval en la cruzada. Algo así sintió Chía cuando Julieta, que había escapado esa noche de la casa de Don Diego para bañarse en los pozos termales de la región, se desnudó aquella noche frente a ella. No podía dejar de mirarla y absorta en sus curvas, la diosa se sintió avergonzada de mirar tan descaradamente a la muchacha que como un pez nadaba entre las aguas y el vapor de los pozos. Una sensación que en su existencia, nunca había experimentado.

Julieta notaba algo diferente en la Luna esa noche. No quiso prestarle atención. Julieta tenía el hábito de nadar en las hirvientes aguas de los pozos y contrariamente a lo que uno pensaría, el agua a esa temperatura, no lograba hacerle daño. De hecho, ese dolor la reconfortaba. De alguna manera, la hacía sentir viva, la hacía desear el mundo y la hacía sentirse deseada por el mundo. En efecto lo era, porque ella, era de esas bellezas como la de la Marcela de Cervantes. Esa por la que lloraba Grisóstomo y por la cual murió de pena.

De pronto la luna se apagó y la noche quedó en tinieblas. Julieta nunca había presenciado tal fenómeno en el cual de un momento a otro, aún cuando el cielo estuviera despejado, la luna, redonda, llena y enorme, de un momento a otro, desapareciera. Julieta escuchó unos pasos sobre la hierba, trató de salir del agua y vestirse, pero la silueta de una india desnuda apareció ante sus ojos. De cabellos larguísimos, de contextura ruda pero femenina, de labios grandes, y unos extraños ojos plateados, la india cautivó a nuestra Julieta.

Esta nadó hacia la orilla del pozo donde se hallaba la india y se quedó mirándola. Contemplando su desnudez. Unos pechos morenos y delicados. Manos rusticas que le indicaban que probablemente se veía forzada a algún trabajo pesado en la encomienda. La india se arrodilló en el pozo mirando fijamente a los ojos a Julieta, quien se perdió en ellos. La india, cuando estuvo a la altura del rostro de nuestra hermosa dama, la besó como nunca la había besado nadie. Le acarició la nuca y la tomó por la cintura y Julieta se abandonó a las sensaciones que la estaban invadiendo. La india le hizo el amor como nadie lo había hecho, la hizo vibrar tantas veces, que finalmente ya no supo distinguir la realidad y la realidad y el ensueño fueron uno solo.

Sintió frío. Se dio cuenta de que estaba a la orilla del pozo y la luna estaba brillando como si nunca hubiera desaparecido en la noche. De pronto sintió un dolor en su corazón que ya conocía porque lo había sentido cuando sentía tristeza, alegría y dolor que extrañamente se mezclaban siempre en su corazón como elixir vital y necesario. Sintió un temblor. Comenzó a convulsionar y volvió a despertar.

Allí estaba. Una luz blanca cegadora que llenaba el cuarto. Una camilla metálica y varias correas. Un par de paletas de madera dentro de su boca, probablemente para que en sus accesos, no se mordiera. Allí estaba aquel hombre que había amado tanto a su Julieta. Esa Julieta que en su paranoia esquizoide ya no sabía si existía. Esa por la que se desgarró su corazón. Ya no quería vivir más. Cada vez las convulsiones era peores, los ataques más fuertes, su cuerpo débil que ya no resistía. Ningún narcótico le calmaba. Su única necesidad era ella.



En alguno de los pocos momentos de lucidez que tenía, Don Diego le había contado su historia a una de las enfermeras del hospital de las hermanas presentinas. Ella solo le escuchaba con lágrimas en los ojos, con asombro por escuchar de esa trágica experiencia. Se convenció a sí misma de que la piedad con ese hombre no podía ser cosa diferente a darle muerte. Poca lucidez le quedaba a él y consideró que el amor de Dios sabría entenderla y perdonarle su pecado. Decidió inyectarle una gran cantidad de un poderoso corticoide mientras dormía. Don Diego moriría plácidamente en sus sueños. Cuando la hermana Josefina aplica la droga a su mortificado paciente este comienza a disminuir su respiración. Sin embargo cada vez toma más aire. Como si estuviera suspirando. De pronto Don Diego siente ese dolor tan familiar en su corazón. Supone que por fin está muriendo y siente ganas de llorar. El dolor es cada vez más fuerte.

Abre los ojos. Gira la cabeza hacia el lado izquierdo. El reloj marca las 3:15 a.m. Julieta ha experimentado ella misma aquel dolorcito del que su amor tanto le habla cuando discutían. Ese mismo que al principio, cuando el coqueteo estaba a la orden del día, él le contó que sentía. Se estremeció. Giró la cabeza y entre sábanas blancas vio a su compañero. Recordó que a él le gustaba que le abrazaran. Lo abrazó, le dio un beso en la frente y al oído, delicadamente, le susurró su nombre.

Pics: "Sueño de verano" & "Míralas!!! Ahí están!!! Son las 100.000 visitas!!!" by movimente cedidas bajo una licencia CC BY-NC-ND-2.0

Soundtrack: Wie ein stern - Frank Schöbel

27 ene 2009

Final

Allí estaba Esther....mirándose al espejo, peinaba su cabello con un cepillo azul...

Esta vez le gusto lo que vio, sus ojos brillaban de nuevo, su sonrisa era verdadera de nuevo, esta vez pinto sus labios de rojo...su uñas estaban arregladas de color sangre de toro...su vestido ya no era negro...esta vez era amarillo.

Mientras seguía peinándose pensaba en aquello que William le dijo en la mañana..."La peor expresión es decir Por qué a mi???"- reflexionaba sobre eso " O sea que si le pasa a otro esta bien"

Hoy quería salir de nuevo....hoy entendió el para que de todo lo que le había pasado....hoy entendió que muchas veces dijo cosas que en realidad no las creía...simplemente era "ella" quien le hacia pensar y expresar cosas que ella no quería...

Pero eso hoy eso iba a terminar....ya Esther iba a darle punto final a eso que no la dejaba desprenderse....iba a tomar medidas drásticas.

Coloco su peina en el tocador...miro hacia la ventana...respiro profundo y camino hasta el closet y saco unas tijeras...empezó a cortar su cabello.....y caia....luego...corto su frente....de tal forma que podía verse parte de su cerebro.

Allí estaba Esther en el suelo....a pesar del dolor intenso no quito su sonrisa de su cara...ya "ella" no iba a estar y así sea en otra vida....Esther iba a ser feliz...

24 ene 2009

La melodía

El ulular del viento le hizo dar un respingo.

Eran las 3 de la madrugada y estaba muy oscuro.
Mecánicamente se asomó por la ventana por enésima vez. Contempló la calle desierta, las grises casas se alzaban melancólicamente al otro lado de la calle.

EL vendría.

Escrudiñó cuidadosamente los arbustos del jardín, pero, una neblina aparecida de la nada, le dificultaba la tarea.

EL estaba cerca.

Un escalofrío recorrió su descubierta espalda y le hizo darse vuelta. Examinó la oscuridad al otro lado del marco de su puerta. Debió cerrarla cuando pudo, aunque no hubiera servido de mucho.
Acurrucado en su cama, indefenso, con un pantalón azul claro de tela ligera y lleno de miedo, Jhon se pegó a la pared, resistiendo ese infantil deseo de cubrirse la cara con la sabana y llamar desesperadamente a su madre. Estaba solo y debía enfrentarlo.
Sus ojos distinguieron algo moverse la oscuridad de la puerta. El pánico se apodero del cuerpo de Jhon. Un suspiro salio de su boca en un vano intento de gritar.

EL estaba en la casa.

El piano de la sala comenzó a sonar una lúgubre y conocida melodía, acabando con el silencio del ambiente. Un grito de terror lejano inundo los oídos de Jhon, que cerró los ojos con fuerza en un vano y estúpido intento subconsciente de protegerse.
De pronto el aire comenzó a hacerse pesado y el frío inundó la habitación, pero no fue eso lo que hizo que Jhon comenzara a temblar. El muchacho acababa de sentir que alguien se sentaba en el borde de su cama.

Jhon se despertó sudando frío, recordaba la horrible pesadilla que había tenido. Era de noche y estaba acostado en una cama blanca, en un solitario cuarto de hospital, la puerta de entrada estaba cerrada.
-que pesadilla tan real-suspiró Jhon.
De pronto las luces del hospital se apagaron.
Se hizo un silencio absoluto durante unos instantes, pero de pronto una tétrica, pero conocida melodía de piano comenzó a sonar y la temperatura del cuarto descendió en picado mientras el aire se volvía más y mas pesado. Jhon cerró firmemente los ojos deseando despertar de nuevo. Escuchó como la puerta se abría lentamente, luego sintió como una mano helada se posaba sobre su hombro.

-¿entonces no hay avances?-preguntó irritado el detective Appleton al doctor de turno.
Levaba 3 meses investigando el extraño caso de un chico que cayó en coma una noche, lo encontraron al pie de un árbol en el patio de la casa de un amigo, al lado del cuerpo del chico había una nota que decía: “fue EL”, pero hasta el momento la investigación no había dado resultados.
-no-respondió el doctor- y ayer tuvo otra crisis de convulsiones, la peor hasta el momento. Casi lo perdemos. Las crisis son extrañamente parecidas a ataques de pánico, y es como si estuviera perdiendo la vida con cada ataque, se le nota bastante envejecido, que no salga de nosotros, pero el cabello se le comienza a notar canoso y el semblante cansado y arrugado. Algo extraño en un muchacho de veinte años. Este es sin duda el caso medico mas extraño al que se ha enfrentado este hospital hasta el momento.
-bien, manténgame informado-dijo el detective mientras se daba la vuelta. El medico le noto una marca roja en el cuello al detective.
-oiga, espere-dijo el medico-¿Qué es esa mancha roja que tiene en el cuello?
-no lo se, esta mañana me salio, debe ser una alergia.
-la madre del muchacho dijo que al chico le había salido una marca como esa la mañana del día que cayó en coma- le dijo el doctor-tenga cuidado.

Habían pasado las 2 y media de la madrugada hacia rato y el detective appleton estaba solo en su cada, haciendo investigaciones en su computadora, cuando con un estallido el computador y las luces se apagaron.
-genial, estalló el transformador-dijo el detective mientras se ponía en pie, pero de pronto escuchó una fúnebre melodía de piano dentro de su casa- un momento… yo no tengo piano…
Pero se quedó en silencio mientras un frío se apoderaba de el y caía de bruces al suelo, quieto y sin poder moverse, concentrado en aquel extraño y terrible pavor que le infundía la melodía.

21 ene 2009

Amor en 4 actos

And when I lost my mind, I knew I was in for the long ride
can i look up to you as you look down on me
can i feel in to you as you felt in to me
i can't help what you see, i can't help but to be
for what i needed to need, she'll make it
love, it's who you know





Acto 1

Ella desesperada marca el numero y el no contesta, se conecta y lo ve allí, ella cree que esperándola, el ni siquiera se le ha ocurrido recordarla, aparte del fastidio de minutos antes cuando recibió su llamada y a pesar de que leía el periódico siempre tendrá la excusa que esta ocupado.

"Estas ocupado?", pregunta ella.

El se toma todo el tiempo en contestar, hace poco ella le recordó del tiempo en que se querían, de la época en que el decía morir por tirar con ella, en la época en que se divertían bailando en una discoteca... o bueno, que el decía hacerlo, porque lo único que le divertía a el eran esas tetas naturales bien proporcionadas, porque lo único que el quería de ella era ese culo blanco y bien cuidado, nada mas, porque la única verdad que había dicho era su nombre, porque nunca la quiso en realidad, esas ganas de verla eran las de su pene que recordaba ese cuerpo desnudo.

"Muy ocupado, hablamos después", contesta el y pasa a la sección deportiva.



Acto 2

La recuerda y se lamenta de el mismo, se lamenta porque ella dice aun quererlo a pesar de todo, que le duele en su mirada, que le duele al respirar, que le duele cada vez que pasa un segundo del tiempo y a el no.

Se lamenta porque ella es tal vez la mujer que cualquiera quisiera, la mujer con la que uno se casaría y quien le tendió la mano cuando estaba en el piso y ya no quería levantarse, se lamenta porque en el fondo el no puede evitar ser tan el, tan difícil y enredado, tan básico y tan complejo, tan negado a sentirse feliz y esperar que la mas perfectamente normal de las mujeres intente darle un poco de amor.

Porque el prefiere miles de veces el riesgo a la seguridad, porque el prefiere que no hable su corazón si no su pene... y este le dice que no.



Acto 3

"Estoy acá" dice ella con voz dormida.

"¿Donde? yo voy a donde estés" contesta el con un tono en la voz que no es capaz de ocultar, ese que contiene una dosis de emoción y mucha de esperanza.

"No, no vengas, ya me voy de la ciudad, además estoy con el" contesta ella, el siente su tristeza, pero no la quiere entender porque el amor nubla lógica y razón.

"Escapate, dame 5 minutos, por favor, 5 minutos" dice el desesperado.

"No, no puedo..." empieza a decir ella y el la interrumpe

"Dejalo, quedate acá, llevo 10 años esperándote, llevo 10 años soñándote, llevo 10 años sabiendo que eres la mujer que ame, amo y amare... por siempre, dejalo" dice el, desnudando su alma, entregando todo lo que siente, piensa y respira en esas palabras, nunca ha estado tan dispuesto a cumplir una promesa como ese día, nunca ha estado tan dispuesto a agarrar la felicidad con dos manos y no dejarla ir.

"No, lo siento, tengo que irme... te amo" dice ella y cuelga.

La felicidad se ha escapado de las manos, 10 años esperando... el no llora, enciende un cigarillo y aspira con la seguridad de quien puede esperar 10 años mas.



Acto 4

Su voz suena al otro lado del teléfono y el siente algo... cosquillitas en el estomago, mariposas en la ridiculez y pajaritos preñados en el aire, ella le recuerda lo bueno que es el sexo, ella es la mujer deseada por excelencia, ella es... todo ya y ahora, lo demás poco importa y en realidad tiene una erección nada mas de pensarla.

Ella es la espera insoportable y el deseo contenido, esperando un cuarto cerrado para estallar, esperando la desnudez y la lujuria debajo de las sabanas... o fuera de ella, en la intimidad, en el calor de su cuerpo, en el sentirse que cuando la penetra de verdad si se puede ser uno, en el olor de su entrepierna, en lo cálido de sus fluidos cuando se viene, en la sensación sublime y efímera de estallar todo su semen dentro de ella, saber que la esta llenando completa de su liquido vital, de todo lo que el puede entregar físicamente.

Ella es la promesa para cumplir, la sonrisa deseada y el beso desesperado, ese que se dan los amantes que saben que la distancia y el tiempo los separa, así que lo hacen como si fuera el ultimo, como si una o dos semanas fuera una eternidad, como si al voltear la esquina el amor de pronto se desaparece y hay que disfrutarlo hasta el ultimo segundo que dure.

Ella es mucho mas que el simple amor corriente y vulgar, ella es mucho mas profunda, ella es incapaz de ser definida en simples palabras, ella es ella... mientras dure.

17 ene 2009

El Hada y El Hombre

Cuenta la leyenda que una vez un Hada se la pasaba soñando que ella era una de las personitas que veía allá abajo….siempre las veía de un lado para otro…siempre tan ocupados….con muchas cosas que hacer. A ellas las veía siempre tan arregladas….con sus vestidos de diferentes colores….a ellos siempre muy elegantes con sus trajes de colores oscuros.

Un día decidió escaparse….cuando el resto estaba durmiendo….ella decidió volar muy rápido y bajar a ese mundo maravillo….donde ella soñaba vivir…como ella estaba acostumbrada a volar en su campo abierto y a gran velocidad….pensó que acá abajo seria igual….

De repente tropezó con una gran antena….no podía controlarse…..y allí vio esa ventana con un hombre….luego sintió un gran golpe

“ QUE RAYOOOOOOOOOOS!!!” – Grito el Hombre, luego vio una mujer tirada en su cuarto…

“Quien eres??? Como llegaste aquí??? Eres estúpida…me tiraste el frasco de veneno” decía con rabia aquel hombre…

Ella solo pudo levantarse y lo miraba un poco asombrada….

“Y tú qué?? Piensas que estas en Halloween??? Que significan esas ridículas alas???” – Le dijo el hombre

La pobre Hada estaba confundida….ella creía que las personas eran amables

“Entonces…eres muda?? Qué quieres?? “

“Tengo sed” – Contesto ella por fin

Luego de beber y comer algo….él le conto que se quería suicidar…que ella lo había evitado cayendo de esa forma en su habitación…ella no entendía por qué él se quería ir de ese mundo que le parecía maravilloso, él le explico cómo se había quedado sin trabajo..que perdió su apartamento, su carro, sus amigos y quedó reducido a ese cuarto de mala muerte….ella le conto que venía de un lugar lejano y que no sabe como cayo allí….le contó que era un Hada que quería vivir en la Tierra.

Desde ese día se convirtieron inseparables…ella aprendió a ocultar sus alas…creía que era posible que un Hada y un Hombre pudieran estar juntos…ella aprendió a comportarse como todas las mujeres…y sin que él lo supiera empezó a usar sus magia para ayudarlo….así fue como él consiguió un nuevo trabajo, sus amigos de la nada empezaron a tocar su puerta….hasta uno de ellos le ofreció un lugar donde vivir y totalmente gratis…

Ella era feliz…sentía algo que nunca había hecho….el corazón se le quería explotar cuando lo veía….sentía que ella era por primera vez una “mujer” plena….hasta que llego ese día….

Luego de varios meses…él llego con una expresión que ella no conocía….no la identificaba

“Tenemos que hablar” – Le dijo él – “Esto no está funcionando”

“Como así?? No está funcionando qué?? Nosotros somos felices” – Contesto ella

“No…no está funcionando….tu eres un Hada…ni siquiera eres humana….no podemos tener una relación normal…hay muchas cosas que no podemos hacer…yo…yo te quiero….te quiero mucho….ese día de no ser por ti…estuviera muerto….pero yo si soy un hombre….y yo necesito una mujer de verdad” – Le respondió

“Pero si tu quieres yo vuelvo a donde pertenezco…allá hay muchos magos…podrían convertirme en humana…yo haría lo que fuera por ti” – Le decía ella

“NO!! TU NUNCA DEJARAS DE SER QUIEN ERES!!! TÚ NO PUEDES CAMBIAR LO MEJOR DE TI POR MÍ!! VETE…UN HOMBRE Y UN HADA JAMAS SERAN FELICES!!!” – Le grito mientras la subía a la azotea de su edificio

Luego él le corto su blusa…allí estaban sus alas….ya no eran brillantes y hermosas….ahora estaban marchitas y rotas….podía notar que tenía como una especie de sangre seca en su espalda.
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Como siempre el despertar en su cama…era maravilloso….desde su ventana podía ver el sol muy de cerca…podía estirar la mano y agarrar las nubes y jugar con ellas…estaba en casa de nuevo y no podía evitar sentir paz....

Se acerco a sus espejo….noto que sus alas ya habían recobrado su color azul….claro….ahora tenían unas líneas que formaban figuras….pero si mirabas de cerca podías notar que eran cicatrices…

Hoy, quería volver a saber de él….ella no podía olvidarlo….se fue para su lugar favorito….busco la nube mas acolchada y se sentó y miró hacia abajo…

Allí estaba él…sonreía….le brillaban los ojos…..luego la vio a ella….la mujer que lo acompañaba…por un instante el Hada quiso ir donde ellos y decirles….decirles que?? Se pregunto….esa mujer era perfecta para él….ella podía darle lo que un Hada jamás podría….ambos eran iguales…

El Hada se levanto….respiro profundo….y reflexiono….

“Es cierto….un Hada y un Humano nunca podrían ser felices”- mientras caminaba hacia su casa le envió un beso…sabia que siempre iba a preocuparse por él….siempre iba a utilizar su magia a favor de él….pero nunca la sabría….ya que ella nunca volvería a donde él…NUNCA

“Clauseeeeeeeeeen!!! Te estamos esperando para la carrera!!! - Le grito otra Hada

“Ya voy….vayan pensando que hacer con el premio….es nuestro” – Le contesto Clausen con una gran sonrisa.

9 ene 2009

El Loco

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Hernández era un niño normal, lo recuerdo en primaria, con su cabello indio alborotado y su tez morena corriendo en un recreo entre los jardines de arena seca y arboles que daban una sombra que refrescaba el alma, en los que jugábamos bolita uñita en aquel bello colegio que hoy en día me parece mas un sueño que una realidad.

Allí donde la felicidad recorría pasillos de infantes que se les escapo el elixir de la eterna sonrisa seguramente Hernández empezó a enloquecer o quien sabe, tal vez fue en su casa, tal vez fue todo junto, tal vez si eran ciertas esas historias, elevadas al nivel de mitos urbanos en los que se contaba que el pobre muchacho había visto a su padre ser asesinado cuando era muy niño y que a pesar de que era un bebe en ese tiempo, el daño le había quedado guardado en su cabeza.

La verdad nadie nunca le pregunto a Hernández porque se había enloquecido, pero si sabemos cuando fue, porque recuerdo ese primer día de clases en Decimo grado que el tipo llego con un sombrero de copa y unas cartas.

Había aprendido unos trucos en las vacaciones y en recreo nos divertimos viendo como a veces acertaba y a veces fallaba, ya no jugábamos bolita uñita tanto, ya nos preocupábamos de las amiguitas y nos masturbábamos a escondidas, ya algunos exhibían orgullosos el hecho de no ser vírgenes y nos emborrachábamos con 4 cervezas… ya nos enamorábamos sin saber que las desgracias del amor y la madurez nos empezaban a alcanzar.

El problema de Hernández no es que hiciera trucos con las cartas, si no que empezó a creerse el cuento de que en realidad hacia magia, que era un tipo importante al que todo el mundo admiraba, un conquistador imaginario que no solo creía que todas nuestras compañeras de colegio estaban enamoradas de el, si no que en realidad el si estaba seguro de eso.

Al principio pensamos que era una simple broma, pero no, Hernández empezó a desarrollar toda una vida imaginaria en la que el creía y cada vez se complicaba mas, pronto ya nadie le decía por su apellido, pronto paso a ser simplemente El Loco.

El Loco durante todo el año desarrollo mejor sus teorías, ya no solo era mago, si no hijo de Pablo Escobar y que había sido mandado a Barranquilla de incognito para ser protegido, sin embargo aun hacia negocios con Gacha (alias el Mexicano) y nos contaba convencido de cómo era perseguido por organismos del estado, pero que el siempre se les escapaba.

Su mirada se volvió ausente, viviendo en un mundo inventado, un mundo dentro de su cabeza y quien podía adivinar sus sueños… o tal vez si, se imaginaba novio de Diana, la pelada mas bonita del colegio y a pesar de que ella en su bella adolescencia ni lo determinaba, el aseguraba que ella moría por el, inventaba encuentros furtivos detrás del coliseo a las 4:30 PM donde realizaba cosas impensables para todos nosotros, pelados normales que veíamos a Dianita preciosa, inalcanzable, pues ella salía con hombres de universidad.

Inventaba rivalidades caballerescas con otro amigo, al que le decía que un día iba a retarlo a duelo por Diana, que escogiera el arma, Felipe se reía del asunto y le mamaba gallo al mismo estilo, en realidad todos vivíamos algo de su extraña realidad y seguíamos el juego en su presencia, tal vez porque era divertido, tal vez porque su realidad era tan fascinante y extraña que hubiéramos querido que fuera cierta, que hubiéramos deseado parte de esa locura.

Llegaron las vacaciones de mitad de año y Hernández no volvió en Julio.

Historias al respecto hubo, esquizofrenia fue una palabra nueva para mi, locura nos costaba menos pronunciar, pero con las hormonas a mil y un mundo que nos parecía abierto de piernas seguimos nuestra vida, del Loco no supimos mas, porque el mundo nos arrastro en su vuelta, nos llevo fuera de aquel paraíso en el que estudie, me quito muchos amigos a los que conocí, se llevo toda inocencia, se llevo los sueños y los remplazo por una realidad en la que quisiera algo de locura.

Una noche llegó, 18 años después, en la que yo miraba por mi ventana una estrella, me quejaba de mi trabajo y la rutina, me quejaba de mi sueldo y mi suerte, quise pensar que era lo que quería ser allá en 1990, cuando la vida era una risa y los sueños los agarrabas al estirar la mano… y me di cuenta que no me acordaba, me di cuenta que tantas cosas han pasado, tantas lagrimas y desencantos, tantos ausencias y despedidas, tantos gritos silenciosos desesperados en la oscuridad sin nadie para abrazar, tantos deseos de escapar de una realidad que no solo me consume, si no que se apropio de mi… me di cuenta que hasta mi memoria, la puta realidad ha querido borrar, pero definitivamente no quería ser el tipo que maldice su trabajo y su soledad desde una ventana mientras miraba una estrella.

Entonces descubrí que hubiera querido ser: Hubiera querido ser Hernández, el esquizofrénico, el loco, aquel que supo escapar de lo mas cruel que tiene la vida… la realidad.

17 dic 2008

Status quo





Un nuevo nombre que pide autorización para hablar contigo. Letras que disminuyen contingencias y conversaciones multimodales y multimediáticas moldean una expectativa por conocer en medio de la profunda soledad y el ansia de conocer y recorrer.

Cortes, jueces, muertes y cinismo que utilicé para cautivarte. Músicas posibles para el alma noctámbula y nuestras letras que con cada click sobresaltaron nuestros corazones mientras en la profecía del fin del mundo solo pensábamos si podríamos hacer tantas cosas con nuestro poder felino.

Un beso, la luna y mi camioneta roja fueron el escenario para ver el futuro. Relaciones de poder en las que ninguno podrá imponerse porque tenemos fuerzas imparables. Animo de dominio y latinismos efímeros que nos hacen ver intelectuales. No lo somos. No lo hemos sido a pesar de que nos lo hemos propuesto.

Poco tiempo tomó para explorar fluidamente tu carne en mis manos al mismo tiempo en que me ordenabas perder el control. Lo hice. Y lo hice porque siento y sentí que valías la pena. Escribí mi nombre en tu boca entre gemidos silenciosos y en tus ojos dibujé una súplica de más caricias. De tanto en tanto nos juntamos entre el vino tinto y el atardecer. Juntos descansamos la química de nuestros cuerpos desgastados para retozar de nuevo entre epístolas y armonías.

Ciento cuarenta espacios posibles en el universo que indican un pensamiento mutuo. Crisis que invaden con una fuerza titánica y nos llenan de pesadumbre profunda. Violencia desgarradora. Paz perpetua. Pactos rotos. Alas blancas. Derrotas provocadas.

Ahora solo esperamos renovar un sentimiento que por poco no logramos reparar. Nos libraremos de las ataduras de lo que pretendimos ser y encontraremos lo que verdaderamente somos. Espero no asustarte porque ahora solo esperamos poder volver a amarnos.

Soundtrack: Something about us - Daft Punk
Pic: "Cherry Blossoms" by dwinton Imagen cedida con una licencia Creative Commons BY-NC 2.0

7 dic 2008

Desafinando


¿Te acuerdas cuando estábamos tocando en ese pueblo para el día de la madre? Qué cosa, nadie afinaba, ninguno caía en los tiempos. Las mamás diciendo ¡tan lindos los muchachos, el futuro de la música! Pero más chistoso era ver al ‘profe’ en su atril, más despelucado que nunca, haciéndonos muecas y los de la banda que de la risa nos desordenábamos más.

Bueno, al final ya nos dio pena y cómo que nos pusimos serios. Pero después de eso nadie iba a olvidarse de nosotros ni del toque. El ‘profe’ terminó tomándolo todo con tranquilidad y en cada presentación incluimos un “número de relajo”; Bien ensayado, cómo no.

Siempre que hay una celebración en el pueblo alguno dice “traigamos la banda del día de la madre” y todos se ríen y buscan otro candidato. Ahora nos llaman así. “La banda del día de la madre”.
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Fotografía por Mauricio Duque Arrubla, Cucunnubá - Cundinamarca 2006

6 dic 2008

Una Simple Masacre

A pesar que ya estaban advertidas, no pensaron que su muerte llegaría tan rápido...

Siempre pensaron que aquella conversación quedaría allí y que juntos podrían salir adelante.... Pero no fue así....

A medida que las letras seguían cada una fue muriendo...

La primera en morir fue la ilusión...siempre ha estado en la primera linea...así que era el blanco mas fácil....

Luego...cayó la esperanza...compañera fiel de la ilusión....que por ir a ayudarla....recibió su golpe mortal....

Siguieron la comprensión y la paciencia....dos virtudes muy fuertes....que a pesar de cada golpe siempre seguían en pie.....tenias varias cicratices...pero esta vez fue fatal....

Y allí estaba el Amor....seguía el camino de cada párrafo....miraba a sus compañeras....y pensaba en no rendirse....sabia que si ella seguía viva....sus compañeras podían levantarse....al terminar los párrafo....el Amor sentía que lo golpeaban cada vez mas fuerte....

Pero...tantos golpes terminaron por herirlo......pobrecito el Amor....esta tirado....herido de muerte...solo mira al Cielo....toma su Rosario con la mano derecha....solo le quedaba esperar morir...

Mira hacia a la izquierda.....y apareció un viejo conocido....compañero de varias ocasiones...alguien de quien ella no gustaba....pero era inevitable que llegara....llego el Dolor....esta vez....lo vio mas fuerte....y este le dijo:

"Vine a estar contigo el tiempo que te queda....no se realmente cuanto será.....pero aquí estaré hasta el final....para que veas que no soy tan malo....traje esta agua....que te refrescara y te ayudara mientras llega el momento"

Y fue así como le roció esa agua en sus ojos....y desde este momento el Amor tiene su mirada triste y apagada.....las lágrimas no lo dejan mirar mas allá.....pero esta vez el Amor decidió esperar morir.....no había porque luchar...el Amor volvió a recordar cada letra, cada coma y allí el Dolor le apretaba su mano mas fuerte....

Esta vez el Amor sabia que esta vez no se iba levantar....miraba cada una de las marcas que tenía del pasado....miro hacia al frente....allí estaban todas sus compañeras ya sin vida....ellas eran las que la mantenía en pie....se acerco a cada una y les dio un beso en la mejilla....

Por ultimo se acostó al lado del Dolor y le dijo: "Solo quedamos tu y yo"

Y el Dolor le respondió: "Esperemos que no sea por mucho tiempo"

Desde ese momento....el Dolor es quien cuida la agonía del Amor....

2 dic 2008

"Si yo hubiera..."

Iba caminando lentamente, casi contando mis pasos, pensando en todo y nada, iba divagando entre planes, deseos, rabias y frustraciones, el atardecer que se abría ante mi demostraba la magnificencia del mundo, pero mis ojos estaban cegados por el arrepentimiento.
Yo no podía hacer mas nada que desearla, que querer tenerla a mi lado. Sin embargo, había sido uno de esos amores prohibidos, uno de esos que te mantienen soñando de día y despierto en las noches, uno de esos que hace que respires con el corazón y no con los pulmones, uno de esos que bloque la mente y juega con ella. Y lo peor era que yo lo sabía. Y lo peor era que no me importaba.
La había visto por primera vez en el borde de un río, recogiendo flores, y me había hechizado su sonrisa, su boca, su pelo, su piel. Me había encantado la manera en la cual sus tersas manos acariciaban las flores y hubiera dado lo que fuera para ser una de esas flores.
Lo recuerdo claramente, estaba paralizado, atontado por lo impactante de su belleza, y no me molestaba, sentía que podía pasar el resto de la eternidad contemplándola. Con un repentino suspiro salí de mi mente y me decidí a hablarle, pero fue entonces que él llego, y la tomó entre sus brazos. El alma se me cayó a los pies y con una ultima esperanza corrí a casa de un amigo en busca, no de consejo, sino mas bien de que me dijera lo que yo deseaba oír, pero la crueldad del destino volvió a hacer presencia, y al oír esas palabras una lagrima se resbalo solitaria por mi mejilla. Nunca en mi vida la palabra "casada" había causado un efecto tan devastador, y jamás lo hará de nuevo. Entonces, en lugar de resignarse, mi mente se negó a aceptar la verdad y solo empeoro mi repentina obsesión por esa mujer. Día tras día y noche tras noche no hacia sino desearla entre mis brazos e imaginar que podíamos estar juntos.Hasta que por fin decidí hacer algo, y admito que no fue la mejor decisión que tome en mi vida. Espere a que anocheciera y caminé hacia su casa sin temor, pues la obsesión guiaba mi cuerpo. Viole la cerradura de su puerta, camine lentamente hacia su cocina, tome el cuchillo más filoso que pude hallar y subí las escaleras hacia su habitación. Allí estaba ella, dormida, tan hermosa como siempre, con su pelo negro y liso sus ojos cerrados que ocultaban un hermoso color negro que hacia juego con sus cabellos. Y su piel tersa y blanca cubierta por una suave bata de lino. Todo esto no hizo sino que el deseo de concluir mi misión aumentara, la quería para mi, y la única manera de lograrlo legítimamente estaba a unos pasos de distancia. Ahí estaba él acostado a su lado. Respiré profundo y comencé a caminar en su dirección, sin embargo, el destino persistía en mi contra y tropecé contra una mesa de noche. Produje un estrépito tan fuerte, que me pareció imposible que ocurriera normalmente. El se levanto rápidamente de la cama, al igual que ella, el miro el cuchillo que yo esgrimía en mi mano y corrió en mi dirección con la clara intención de quitármelo. Sin embargo, el destino tampoco estaba de su parte, y esta vez yo tuve suerte. Clavé el cuchillo en la parte superior de su estomago. El me miro fijamente, y luego a su esposa, mientras intentaba en vano articular la palabra: "corre". En ese momento yo no comprendía del todo lo que estaba haciendo, como ya he dicho, era la obsesión que controlaba mi cuerpo. El hombre cayo de espaldas al suelo, moribundo, y cuando yo me disponía a darle el golpe de gracia, el destino dio la estocada final en mi contra, ella se atravesó entre mi arma y su amado esposo, solo entonces y de la manera mas cruel imaginable entendí el amor que sentían el uno por el otro y entendí que nada de lo que yo hiciera o hubiera hecho hubiera bastado para que ella fuera mía. El golpe que le propine fue mortal, y justo en ese momento, la obsesión me abandono y mi mente fue capaz de controlar sus cinco sentidos, pero también fue capaz de sentir el dolor de lo que había hecho, la tomé entre mis brazos, pero ya nada de vida quedaba en ella. Y mi dolor fue tan grande que la única salida que encontré estaba empuñada en mi mano. Con un movimiento rápido y sin dudarlo ni un segundo deslicé ese cuchillo de un lado a otro de mi cuello. Con mis ultimo retaso de conciencia pedí perdón por lo que había hecho. Sin embargo aun estoy aquí, encadenado a la tierra, condenado día a día a amarla sin poder tenerla, condenado a sentir el dolor. Condenado a pensar simplemente: "si yo hubiera"...

PD:este es una historia que publiqué en mi blog hace un tiempo, espero que les guste, comenten si les gustó o no, para saber. saludos ^^.

El Nuevo Comienzo

Con solo tres magos y dos pendientes por aceptar invitaciones, esto no es que empiece de nuevo, si no que simplemente estamos dejando atras la pereza de escribir... ahi nos leemos.

23 nov 2008

Frente a frente


Me has hablado, por ejemplo, del príncipe feliz y cómo fue entregando sus riquezas para unas personas que nunca conoció de un pueblo del que pudo llegar a ser rey. Y como a él, me cuentas de lugares que no conozco. No me canso de mirarte a los ojos cuando hablamos. Ellos narran historias que tus palabras no alcanzan a decirme.
Cuando tú no estás conmigo bajo mi cabeza y veo pasar las personas; en ellas descubro los sitios de los que me hablas. Algunas se llevan fotografías mías y tal vez un día de estos encuentres en tu viaje permanente una imagen donde estemos tú y yo conversando de lugares exóticos, nieves perpetuas, desiertos vivos y caminos empedrados marcados por el cansancio. La imaginación de quien nos vea en la fotografía se llenara de nuestras historias, silenciosas en apariencia, ruidosas para ti y para mi.
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Fotografía por Mauricio Duque Arrubla, en Barcelona, Octubre de 2008

11 nov 2008

De nuevo el camino

(Este cuento y el de mas abajo fueron escritos hace ya varios años, en una epoca en que me dedique a escribir sobre la Tierra Media, espero que no sean demasiado "Tolkien" y puedan ser leidos sin necesidad de conocer la obra del gran escritor)

El camino había sido largo, y por fin se acercaba a su final, Bree se acercaba, o mejor, el se acercaba a Bree, el calor del mediodía era fuerte y el hambre le hacia sonar las tripas, a su edad el camino ya era largo, y las cosas molestaban mas.

Lo dejaron entrar sin muchas preguntas, pero con actitud sombría, como aquel que se ha ido sin avisar y ha vuelto diferente, tanto, que solo los mas viejos lo reconocerían.

Vio el cartel colgando en la entrada “El Poney Pisador” y la figura del pequeño caballo blanco le trajo recuerdos, de sus amigos, de sus vivencias, de sus penas, de sus alegrías.

Los hombres lo vieron entrar y se sobresaltaron al ver un Hobbit en Bree, había pasado mucho tiempo desde que el ultimo había vivido o venido por ahí, algunos lo consideraron como una mala señal, otros no le dieron importancia, otros, los mas viejos se alegraron por recordar tiempos difíciles que precedieron a tiempos mejores, como cuando uno recuerda el esfuerzo que le permitió conseguir grandes metas. El Hobbit sonrió y se acerco a una mesa vacía en una esquina de la posada, cerca de la chimenea. Una chica se le acerco, era muy joven, y entre el sudor y su agitación se observaba que era muy bella, sus cabellos rojos opacos rizados le caían sobre la cara y la espalda y el Hobbit no puedo dejar de notar su nerviosismo, y era lógico, jamás había visto un Hobbit, en aquella época ellos se escondían de la gente grande, se escabullían en los bosques, entre los árboles, sin ruido, tal cual ellos saben hacerlo y ya nadie visitaba la Comarca, es mas, en la mayoría de los mapas había desaparecido el lugar. Pero claro, existían las leyendas y los cuentos.

- Desea tomar algo? - pregunto la chica indecisa

- ehhhh... Si?... Si, gracias... Cerveza... - contesto el hobbit despertando de su ensueño

La chica dio media vuelta

- Espera!!! Por favor, necesito saber algo - dijo el Hobbit antes que ella se retirara

La chica volteo y lo miro con sus hermosos ojos azules bien abiertos.

- Sí... Dígame?

- Es que... Hace mucho tiempo, bastante en realidad, conocí al dueño de este lugar, Cebadilla era su nombre.... Todavía vive? - pregunto el Hobbit

- Mi padre?.... Si, vive aun, aunque esta muy enfermo, de que lo conoce? - pregunto la chica intrigada

- Bueno, una vez estuve acá y armamos un gran alboroto, seguro que no me ha olvidado - dijo el Hobbit con una sonrisa nostálgica

- Bueno, mi padre jamás ha sido de buena memoria, olvidaba dar los recados que le encargaban....

-.... Si, lo se - y se hecho a reír el Hobbit - puedo verle? - agrego

- mmmm no se, a veces amanece indispuesto y en realidad ya no ve bien - dijo la chica

- Solo quiero charlar con el, si no me reconoce, pues me voy y ya - le contesto el Hobbit

La chica lo miro un instante, recordó las historias que le contaba su padre acerca de los Hobbits y especialmente de ese grupo que una noche llego y cambio para siempre la visión que tenían en esa época de esas personillas, visión que igualmente se había perdido ya.

- Por cierto aun no se su nombre... - dijo el Hobbit

- Rosa

- Lindo nombre

- Mi padre me lo puso en honor de la esposa de un Hobbit o eso dice el, dice que fue una de las personas mas valientes que conoció- dijo la chica

- Si, lo se

- Lo conoció? - pregunto la chica

- Digamos que sin el yo no estaría acá - dijo el Hobbit

- Pero usted no parece tan viejo, es decir, se nota que ya vivió su mejor época, pero aun así... - dijo la chica, pero callo, pensó que estaba siendo algo impertinente

El hobbit soltó una carcajada

- No te preocupes, es cierto, pero del lugar donde vengo el tiempo no se cuenta como se hace acá - dijo el Hobbit entre risas

- La comarca? - pregunto Rosa

- No, no vengo de la Comarca, es decir, pase por allá, aunque ahora es muy diferente a lo que deje alguna vez, pero no, vengo de muy lejos - contesto el Hobbit

- Como es su nombre? - pregunto nuevamente Rosa

Pero un gran estrépito interrumpió al Hobbit cuando iba a decir su nombre, 2 hombres gritaban al otro extremo del lugar, se insultaban porque uno le había robado al otro, pero el otro decía lo contrario. Rosa meneo la cabeza

- Espérame un momento, no te vayas, déjame y arreglo este asunto - dijo Rosa

Se acerco a los dos tipos separándolos como pudo, los regaño y les exigió en tono autoritario que se largaran del lugar, era gracioso ver como dos tipos tan grandes eran sermoneados por una chica, pelirroja, con grandes ojos azules y delgada que no podía pasar de los 17 años. Los tipos se agarraban y la chica los volvía a separar, hasta que se calmaron y se fueron. El hobbit miraba la situación divertido, sonreía ampliamente.

- Sígueme mediano... así es como los llaman no? - dijo Rosa al acercarse al hobbit

- Algo así - y se paro detrás de ella

Siguieron detrás del mostrador donde un tipo muy parecido a Cebadilla atendía, luego seguía un pasillo con paredes algo sucias, luego una puerta sencilla, Rosa toco.

- Quién es? - dijo una voz de mujer

- Rosa!

Y entraron.

Una anciana atendía a un hombre acostado en una cama, el hombre parecía dormir, la mujer lo miraba con aire preocupado.

- Esta muy mal - le dijo a Rosa

- El señor insistió en verlo mamá, dijo que era un viejo amigo - dijo Rosa disculpándose

El Hobbit que hasta el momento había estado detrás de Rosa se dejo ver, la anciana quedo boquiabierta y el hombre intento levantarse a mirar sin éxito

- Quién es mujer? No veo! Quién es? - dijo el anciano

- Soy yo viejo, un viejo amigo y quiero hablar contigo - dijo el Hobbit acercándose a la cama

- Señor Sotomonte!!! Tanto tiempo sin verlo, aunque no lo hago bien, ya sabe, los ojos empiezan a fallar con la edad, pero indudablemente es usted, lo han atendido bien? Que tal le parece la cerveza? Tiene aun el mismo sabor? Todavía tiene esas compañías extrañas? Si, el Montaraz ese... - y siguió diciendo Cebadilla sin parar

- Ya, ya amigo, toma las cosas con calma, una cosa a la vez - dijo el Hobbit sonriendo

- Oh señor Sotomonte, es que a veces olvido que ha pasado tanto tiempo, ahora hay reyes en el sur, pero el norte cada vez es mas olvidado, e incluso el tiempo parece cambiar, me siento como un objeto que ha dejado de servir pero que se niegan a botar - dijo Cebadilla

- En cierta forma lo somos - contesto el Hobbit

- y sus amigos señor Sotomonte? - pregunto Cebadilla

- Hace tiempo partieron a encontrarse con su destino amigo - contesto el Hobbit

- Y usted? Porque ha venido? Uno de sus amigos, el señor Merry talvez, me contó que usted se había ido en una largo viaje, donde la vida es eterna - dijo Cebadilla

- Nada es eterno, ni siquiera Arda - contesto el Hobbit

- Eso creo yo también, y es malo alargar mas de lo debido lo inevitable, a que a venido señor Sotomonte? - dijo Cebadilla

- A no alargar lo inevitable... a verte por ultima vez, buen amigo e ir al sur, a hablar con los reyes - dijo el Hobbit

Se quedaron mirando en silencio largo rato, Cebadilla alargo su mano y tomo la del Hobbit, Rosa en ese momento observo que le faltaba un dedo y una lagrima se derramo de los ojos del mediano.

- Hay heridas que ni las tierras del oeste no curan - dijo el Hobbit

- Podrías dejarnos solos mi querida Rosa? - hablo Cebadilla

Rosa salió, su madre lo hizo antes, se sentó pensativa en una banco detrás de la barra, así estaba cuando su hermano le dio una palmada en su hombro.

- Levántate holgazana!!!

- Ya, ya, solo pensaba, algo que a veces deberías hacer tu - le contesto Rosa y se dirigió a atender mas clientes

Paso un rato considerable, empezó a anochecer, Rosa no se podía sacar de la mente al Hobbit, con las primeras estrellas salió el Hobbit, sonrió al verle y le pidió una cerveza, se la tomo en silencio, disfrutando cada sorbo.

- Señor Sotomonte, dormirá esta noche acá?

- eh?... No, no gracias linda Rosa - dijo el Hobbit

- Por cierto, no me ha dicho su nombre, pues si su apellido, pero no su nombre - le dijo Rosa con una gran sonrisa

- Ese no es mi apellido, tu padre se ha confundido, te contó alguna vez de alguien quien canto en esa mesa, y que de repente desapareció? - dijo el Hobbit

- Si, claro, todo el tiempo, incluso aun lo hace, estaba usted ese día acá?

- No, es decir, si, esa persona era yo - dijo el Hobbit levantándose para irse

- Bolsón!, Frodo Bolsón es su nombre!, mi padre nos hablo mucho de usted y de Samsagaz, lo recuerdo, es.... Es... Increíble... Es como ver al personaje de un cuento... Es ver al personaje de un cuento!!! - dijo emocionada Rosa

- Gracias, Gracias, pero no hagamos escándalo, dile a Cebadilla que la cerveza sigue igual y que tiene una linda hija, muy inteligente, Gracias Rosa! Cuánto te debo? - pregunto el Hobbit

- Cómo cobrarle señor Frodo? Mi padre me ha dicho que a usted le debemos el estar aquí, no se porque, pero le creo - dijo Rosa

El Hobbit sonrió

- Gracias Rosa


Frodo empezó a caminar por el sendero que salía del Poney Pisador hacia la salida de Bree, algunos se asustaron al oírle cantar, otros pensaron que era un borracho mas, otros, los mas viejos y Rosa, escucharon atentamente y con deleite la letra de la canción:

El camino sigue y sigue
Desde la puerta
El camino ha ido muy lejos,
Y si es posible he de seguirlo
Recorriéndolo con pie decidido
Hasta llegar a un camino más ancho
Donde se encuentran senderos y cursos.
Y de ahí a donde iré? No podría decirlo

Esa noche el viejo Cebadilla murió, Frodo recorría un viejo camino por segunda y ultima vez.


Turin Turambar
Jaime Díaz Uribe
Marzo 29 del 2001

Uno mas de ellos.

(Me dicen que este cuento ha sido plagiado por un pseudo escritor fanatico de Tolkien peruano, nunca lo publique en este blog, pero si ha salido en varias listas de correo y paginas dedicadas a la Tierra Media, pues ahí se los dejo)



El miro el limpio cielo estrellado antes de morir, suspiro y volteo para ver de nuevo a aquel ser, quien se acercaba con una mano en la boca, asombrada, casi aterrorizada ante su presencia, de repente un elfo la detuvo y ella lo abrazo, el elfo llevaba un arco en su mano, era el arco que había disparado la flecha que ahora le había atravesado la garganta, que le hacia escupir sangre y aguantar ese dolor, un dolor no tan grande como para los que ya había soportado, pero si diferente, era el dolor de quien sabe la muerte cercana e inevitable. El elfo y la doncella se acercaron, se sintió avergonzado ante su fealdad, miro sus manos, sus espantosas manos y luego vio las de la pareja y recordó.....


Recordó verdes prados frente a un hermoso lago que reflejaba las luces de las estrellas que brillaban mas fuerte que nunca, en días de inocencia plagados de la felicidad que solo esta puede darle a quienes contemplan la mas hermosa creación de Eru, Ea. Vio de nuevo sus bellas manos recogiendo flores nocturnas para llevárselas a su doncella, la mas bella de todas y recordó su brillante sonrisa y sus hermosos cantos. Fueron días hermosos que había creído olvidar después de tanto dolor, con lagrimas borro sus momentos mas felices, lagrimas que jamás pensó derramar.

Pero el mal llego y ellos en su inocencia quisieron combatirle, y poco pudieron hacer, entonces llego el caballero que les propuso ir a mas allá del mar, donde vivirían lejos de la sombra que les acechaba, mas el no confió, no quería abandonar sus prados, su lago, sus flores. Entonces la doncella decidió ir con los que partían y el no tuvo mas remedio, su amor por ella era mas grande que el amor por la tierra, pero quiso llevarse algo de recuerdo y se alejo en busca de flores, pronto se hallo solo cuando sintió un dolor en su nuca, el primero y se sumió en oscuridad, la cual nunca le abandonaría ya mas.

Lo despertó el hambre, mas no veía nada, se encontraba encerrado en una pequeña habitación donde apenas podía acostarse y no podía permanecer de pie, un olor nauseabundo le causo nauseas y el terror se apodero de el, pensó que había sido enterrado vivo y empezó a gritar y a golpear las paredes, destrozo su manos para siempre, pero nadie respondió, luego de un rato cuando no pudo seguir gritando y solo su respiración le hacia compañía le pareció escuchar algo, una risa.

Y sin embargo confió, confió en sus amigos, ellos jamás le abandonarían en ese lugar y esa confianza le hizo permanecer cuerdo

Pasaron largo rato sin comer y sin beber, estaba convencido que había sido sepultado en vida cuando alguien abrió una loza que tapaba su calabozo, una antorcha le cegó y dos inmensas garras le jalaron fuera del lugar, un ser de largos brazos y espantosa figura le arrastro por el piso y el, débil como estaba no pudo defenderse, pensó que su hora había llegado, para su desgracia no fue así.

Y aun allí su esperanza continuo... su pueblo le salvaría tarde o temprano

A medida que avanzaba por un pasillo empezó a oír voces que provenían de calabozos (o tumbas, pensó) en las paredes, algunos eran gritos desgarrados, otros lamentos profundos, pero a medida que se acercaba oía mas los primeros, y aun peor, eran aullidos que helaban la sangre, aullidos de dolor que el no alcanzaba imaginar, pero que pronto los emitiría.

Una puerta se abrió y una inmensa sala se abrió ante sus ojos, lo levantaron del piso de sus largos cabellos y lo lanzaron a un rincón junto con otros elfos, estos balbuceaban y escupían espuma por la boca, el terror se empezó a apoderar de el, de repente un ser maligno y oscuro se acerco, era inmenso, sombra y fuego se conjugaban y sus ojos brillantes demostraban sevicia infinita, el ser sonrió y pronuncio palabras inmundas en la lengua impronunciable, en ese momento no entendió, luego lo haría.

Fue levantado por dos Trolls y así pudo observar bien la sala, estaba llena de maquinas de torturas indescriptibles que arrancaban terribles gritos de dolor, deformaban el cuerpo y la mente, algunos incluso no gritaban, solo sus ojos demostraban el dolor que sentían, y otros ni siquiera eso, mostraban furia, odio y demencia, pero apenas eran elfos... se parecían al ser que le había sacado de la celda. Pero su esperanza siguió viva.

Describir su dolor es imposible, pero si se ha de decir que era tal que el tiempo se le eternizo, un suspiro era un vida entera y grito, desgarro su garganta hasta quedar sin voz, luego su mente empezó a fallar y su cuerpo a cambiar.

No podría decirse cuando su esperanza murió, talvez no fue así, talvez esa se convirtió en su odio, el ser de fuego y sombras se le acerco y como leyendo su mente le dijo en su idioma “te han abandonado, se han ido lejos en busca de la luz del Oeste y te han dejado con tu sufrimiento”. Y juro venganza.

Y el dolor desapareció, lo soltaron y como una bestia domesticada obedeció a sus torturadores, el temor y el odio lo convirtieron en un animal. Pronto conoció el nombre de su raza. Orco.

Combatió fieramente en todas las batallas antiguas y asesino cruelmente a todo ser que su camino cruzase y pronto olvido quien era y su origen, solo recordaba a su amo y su odio mas no sus motivos.

Y allí estaba ahora, agonizando. Había salido a patrullar las fronteras del reino de Doriath, aquel que no podían conquistar y habían sido emboscados por un grupo de arqueros elficos, uno de ellos era el que ahora veía, sonrió y de algún lugar surgió el recuerdo de una esperanza en su raza, su verdadera raza, la cual se cumplía ahora, pues ahora cuando sentía cerca la muerte se sintió feliz pues se vio libre de nuevo como cuando recorría los verdes campos a la luz de las estrellas.

Beleg Arco Firme se acerco al orco que acababa de morir por sus temidas flechas mientras acechaba una doncella de Doriath, de repente vio en el algo que le sorprendió... sonreía.


La primera voz observo al recién llegado a sus estancias oscuras

- Uno mas de ellos – exclamo
- Si, pero este es especial – contesto una segunda voz algo femenina
- Y que tiene de especial? – pregunto la primera
- Recordó – contesto la segunda

La primera voz permaneció en silencio y observo al ser
- Solo veo maldad y negrura, crees que merece el perdón? – pregunto
- Si, pero sus culpas deben ser expurgadas – contesto la segunda voz
- A veces eres muy condescendientes, ves bondad en donde mas oscuro es – dijo la primera voz
- Y puede ser que eso sea bueno, si muchos de nosotros lo hubiéramos hecho contaríamos otra historia hoy – replico la segunda

La primera voz permaneció callada.

El orco miro sus manos en la tenue y misteriosa luz de la inmensa estancia y noto que sus cicatrices empezaban a cerrarse, sus manos volvían a ser las de antes.

Una inmensa puerta se abrió con gran estrépito despertando al Orco de sus pensamientos y de ella surgió una luz dorada, momentáneamente le cegó, luego se dirigió hacia ella atravesando la puerta la cual se cerro a su paso.

- Bueno, sus culpas serán sanadas – dijo la primera voz

La segunda voz sonrió.



Túrin Turambar
Jaime Díaz Uribe
Marzo 13 del 2002

10 nov 2008

Empezando de nuevo

Con la intención de revivir esto, por favor diga quien esta dipsuesto a participar de este proyecto, por favor deje un mensaje en este post, si ya es integrante no sera borrado, si quiere ser uno nuevo pues deje su correo.

La intención es escribir, no amarrarnos con palabras o plazos, pero si escribir.

22 oct 2008

Un Beso Regalado

Un lunes a las 8:00 PM tal vez sea el mejor momento para suicidarse.

Con andar cansado me acerque a la parada del bus, porque además de toda la presión del trabajo, la soledad de esta ciudad y la repentina nostalgia de sentirse vacío, tenía el carro dañado y el corazón destrozado por sentir que el amor es algo extraño a mi persona, algo parecido al humo, que ves pero nunca puedes agarrar.

Apareció el bus y me subí en silencio, pague y recibí mis vueltos, me sentía resignado a esta vida casi automática, esta vida robótica y totalmente carente de algo que me reviente de alguna sensación, porque es que en realidad nada importa, nada sirve.

Allí me sorprendió la vida.

Cuenta esta historia, que tal vez haya sucedido en mi corazón o en mi mente (lo cual es irrelevante), que ella se subió en un lugar no determinado por mi depresión, yo estaba sentado como cualquier perdedor al final del bus y ella me miro, tenia un vestido blanco y los ojos negros, tenia una mirada que me atravesó y el cabello del color de sus ojos, tenia un lunar encima de su labio, no un lunar cualquiera, no en cualquier lugar, era uno pequeño y mandado a poner en todo la mitad de la parte de arriba de sus labios.

Me miro y se sentó en la primera banca, me sentí inquieto y me pregunte por ella, esa mirada me había dejado perturbado, su piel blanca me había trastornado y empecé a fantasear con besar ese hombro descubierto, nunca había deseado algo tan simple de esa manera y nunca mas lo volví a hacer, mis ansias no eran solo sexuales, no era sentimiento burdo, basico y primitivo, pero aun así era algo imposible de definir, quería ese hombro, esos cabellos y esos ojos para mi, quería un titulo de propiedad sobre esa piel.

¿Pero que son los sueños de un hombre? ¿donde viven y donde mueren?, tal vez se van a hacer compañía a todos las ilusiones perdidas, tal vez caminen por un inmenso bulevar sin fin, donde caminan todas las aventuras que nunca se completaron, donde reposan aquellas ideas que nunca se realizaron, donde nos ven pasar las nubes de la nostalgia y el adiós.

Los sueños de un hombre se vestían de blanco y se apresuro a bajar al llegar a una parada, caminó directo a mi y yo no podía dejar de mirarla y entonces cuando pensé que iba a timbrar se paro delante de mi, se agacho y me beso.

Un beso inesperado, el beso regalado de una extraña, una caricia en mi cara y sentí el olor de su saliva, la textura de sus labios y el sabor de su lunar, sentí que si alguna vez ha existido un cielo, el se había materializado allí, en un bus ordinario, con un ángel vestido de blanco que se bajo en esa esquina.

Permanecí sentado en aquel solitario bus y no reaccione hasta cuadras después, aun faltaba para llegar a mi destino, pero decidí correr cuadras atrás en su búsqueda.

Hoy me he subido como muchas tardes cualquiera al mismo bus, a la misma hora, hoy me he bajado en el mismo lugar donde se bajó, hoy he caminado por calles vacías esperando encontrar a la dama del vestido blanco, incluso he buscado un beso parecido, he acariciado muchos hombros, pero nunca ha sido igual, porque en ese beso estaban todas las fantasías que ni siquiera yo sabia que tenia, aquellas que no existen en realidad porque nunca se pueden realizar.

¿En que terminan los sueños de un hombre?, me pregunte antes de dormir.

En simples palabras regaladas como aquel beso, en una historia sin moralejas y sin final, en un saco lleno de las promesas que nunca se cumplieron e ilusiones que nunca se realizaran.

5 oct 2008

CONVOCATORIA LITERARIA NOCTURNO 2008

Este Año la Organización Proyecto Nocturno realiza la cuarta versión de su Festival de Arte Joven, nuestra temática para esta ocasión es rendirle tributo a la Cultura Popular Caleña. Para ello nos encontramos realizando la convocatoria literaria en dos modalidades, Cuento Corto y Poesía, Alrededor de nuestras convocatorias, nos interesa involucrar a los jóvenes en un ambiente de tertulia y fiesta cultural por medio de las letras y la lectura de las mismas, así, las convocatorias se encuentran dirigidas a jóvenes que se encuentren en el rango de edad de 15-25 años.

Todos los Jóvenes pueden participar sin importar si son o no estudiantes, si viven o no en la ciudad de Cali o si son escritores profesionales o aficionado.

Las Obras deben ser enviadas en un sobre de Manila Sellado con la Fotocopia del Documento de Identidad y la carta donde verifique la autoría de cada una de las obras que participan de la convocatoria, el sobre lo deben enviar a la Universidad Javeriana Edificio El lago, salón 3.8 denominado Oficina de Gestión Estudiantil a nombre de La Organización Proyecto Nocturno, mencionando que es para las convocatorias de cuento y poesía.

Adjuntar todos los datos personales completos y seudónimo (es obligatorio). Las Obras pueden enviarlas también por correo electrónico, pero es indispensable los documentos que se requieren como lo son la carta de autenticación y la copia del documento de Identidad.

El Día 7 de Noviembre (Viernes) se realizará el evento más importante del Festival, a partir de las 7:00 Pm se dará inicio al CABARET LITERARIO, actividad donde ustedes son los invitados de Honor, en ella, se compartirá la noche con los mejores escritores y poetas de la región del Valle del Cauca y algunos invitados de Honor de procedencia Nacional. Esa noche ustedes darán lectura y declamación de sus obras y se presentará al Jurado de Honor de cada una de las modalidades de la Convocatoria.

En el cierre del Cabaret se anunciará quienes serán los ganadores de las menciones de Honor del Festival de este año. El Cabaret es el evento más importante de todos los que tenemos programados para el Festival en su versión 2008 y las únicas personas que no cancelarán el costo de la boletería de entrada serán ustedes los participantes.
Les recordamos que para participar en cada Modalidad son:

Cuento: Máximo 3 cuentos de 3 páginas de extensión cada uno.
Poesía: Máximo 5 Poemas de 2 Páginas de extensión cada uno.

Las Obras deben ser inéditas y no pueden participar o ser publicadas antes de la fecha del Festival en otra convocatoria o en alguna publicación.
Mayores Informes

25 sept 2008

Muy dentro de mi

Me resulta curioso el sabor de esta carne.

Es un poco dulce y creo saber porque, la paso con un poco de vino y me llama la atención que es algo blanda, pero igual me embarga la felicidad con cada bocado, tanto que una lágrima sale de mi de vez en cuando, al sentirla muy dentro de mi, al sentirla a mi lado al comer.

Tal vez deba contar la historia completa para que sepan el porque la alegría, el porque la lágrima y el porque es tan dulce la carne junto a ella.

Toca retroceder un año atrás en mi vida y decir que esa mañana salí a trotar por la bahía y la vi por primera vez, blanca y hermosa, su largo cabello negro se movía al ritmo de un labrador dorado que la arrastraba por ese corredor y casi me atropella.

- Disculpe - me dijo con su acento de Antioquia

Yo desde ese momento la ame, me habían dicho que el amor a primera vista era una utopía, me habían dicho que el amor para siempre era una mentira, pero se equivocaba y acertaba quien me había metido esas ideas en la cabeza.

Porque en serio la ame, todas las mañanas me levantaba con la ilusión de verla, mi día era triste cuando no estaba, mi día era felicidad con el simple hecho de verla y saludarla con un leve movimiento de cabeza, porque es que el amor hace pequeñas las cosas grandes e inmensas las pequeñas.

Hasta que un día me arme de valor y hable con ella, hable como nunca había hablado con una mujer, duramos horas sentados con su perro dando vueltas a nuestro alrededor contándonos nuestras vidas, mi soledad y sus desgracias, como le habían roto su corazón en Medellin y había decidido buscar trabajo para su psicología en otros lados, con la suerte que la había encontrado junto al mar, con la suerte que me había encontrado a mi.

Empecé a darme cuenta que congeniabamos en muchas cosas y a los tres meses vivíamos juntos, me contó de su maravillosa familia, de su linda hermana, de sus increíbles padres y de la vida perfecta que tenia hasta que un idiota le partió el corazón, yo le conté mi eterna soledad, mis dificultades con las relaciones, mi eterno pesimismo y la sensación de que la desgracia siempre me rondaba.

Por única vez en mi vida fui feliz, pero siempre supe que la convivencia con otra persona no era fácil, mas si esa otra persona era yo, así que tuve que ceder en muchas cosas, cedí en dejar que ella organizara mi ropa, cedí en no dejarme llevar por mis mas básicos instintos en mis relaciones sexuales, cedí en no ver tanto fútbol ni jugar tanto con mis consolas, cedí en dejar de visitar mis sitios de Internet favoritos, pero lo que si me costo trabajo fue en dejar de ver aquellos sitios porno sado masoquistas que tanto me gustaban y ella consideraba tan impropios, así que lo hacia a escondidas y cuando ella me descubría se armaba Troya.

Pero todo valía la pena, por ella, por sus ojos, por su piel blanca, todo valía la pena, incluso cuando al año me regañaba públicamente por mi tosca manera de comportarme, por no afeitarme todos los días, por preferir quedarme en casa y no ir a las mejores discotecas de la ciudad a rumbear con ella, incluso le molestaba que a mi no me importara cuando era evidente que salia con otra persona, porque al final me consolaba saber que me engañaba con uno de mis mejores amigos, que en realidad le importaba tanto como para no hacerlo con un desconocido.

El amor no es perfecto, en realidad esa es la única verdad inmensa como el cielo.

Un día llego borracha y me insulto como de costumbre, acaba de tener sexo con mi amigo y me lo escupió en la cara, yo seguí jugando con mi consola sin decir nada, se burlo de mi y mi forma de hacer el amor, se burlo de mi y mi miserable vida, pero yo jugaba El Señor de los Anillos y estaba en el ultimo mundo, cuando debía vencer a Gollum, llevaba semanas intentando pasármelo y al fin lo estaba logrando, ella me miraba y gritaba, pero yo no oía nada, de repente arranco de un jalón el cable de energía, justo en el momento de mi triunfo.

Me levante y la vi sonriendo, saboreando mi rabia, que fue creciendo y en ese momento de iluminación descubrí otra verdad, que el amor no es por siempre y que este acababa de morir como empezó, justo ahí, en ese instante fugaz.

Me dio lastima golpear su hermosa cara y verla darse con tanta fuerza en el piso, me dio lastima patearla y hacer que se callara, me dio lastima poner mis manos alrededor de su cuello y empezar a apretar mientras sus ojos miel se ponían saltones y sacaba su lengua que empezaba a ponerse morada.

Me dio lastima pero cuando ella no se movió mas, cuando permanecio quieta y quite mis manos, a pesar de esas feas marcas en su cuello, descubrí que acababa de eyacular en mis pantalones y que mas que lastima acababa de tener el mejor orgasmo de mi vida.

Mas lastima me dio tener que cortarla en pedazos porque entera no cabía en el freezer, mas lastima me da no saber que hacer con su cabeza, porque si bien me encantaría disecarla y ponerla de adorno en la sala, pienso que a lo mejor mis visitantes pueden encontrarla algo macabra.

Pero ahora, que he horneado su carne me doy cuenta que el amor es algo extraño, nunca la dejare de amar, por eso su carne me sabe a miel, por eso se que cuando la coma mi cuerpo tomara lo mejor de ella y expulsara lo mano, solo su esencia buena permanecerá muy dentro de mi, ella empezara a ser parte de mi.

Igual pasara con el labrador... no, no me lo pienso comer, que clase de persona seria si me comiera a ese perro fiel y adorable, pero el que tanto la quería también debería tener un poco de ella.

Me tomo un vaso de vino de mas y empiezo a pensar en su hermana, que ayer llamó preocupada, le mentí lógicamente, le dije que hace un par de días no sabia de ella, que su celular estaba apagado y sus pocos amigos no daban razón, ella dijo que vendría buscarla... yo la he invitado a almorzar.