Un lunes a las 8:00 PM tal vez sea el mejor momento para suicidarse.
Con andar cansado me acerque a la parada del bus, porque además de toda la presión del trabajo, la soledad de esta ciudad y la repentina nostalgia de sentirse vacío, tenía el carro dañado y el corazón destrozado por sentir que el amor es algo extraño a mi persona, algo parecido al humo, que ves pero nunca puedes agarrar.
Apareció el bus y me subí en silencio, pague y recibí mis vueltos, me sentía resignado a esta vida casi automática, esta vida robótica y totalmente carente de algo que me reviente de alguna sensación, porque es que en realidad nada importa, nada sirve.
Allí me sorprendió la vida.
Cuenta esta historia, que tal vez haya sucedido en mi corazón o en mi mente (lo cual es irrelevante), que ella se subió en un lugar no determinado por mi depresión, yo estaba sentado como cualquier perdedor al final del bus y ella me miro, tenia un vestido blanco y los ojos negros, tenia una mirada que me atravesó y el cabello del color de sus ojos, tenia un lunar encima de su labio, no un lunar cualquiera, no en cualquier lugar, era uno pequeño y mandado a poner en todo la mitad de la parte de arriba de sus labios.
Me miro y se sentó en la primera banca, me sentí inquieto y me pregunte por ella, esa mirada me había dejado perturbado, su piel blanca me había trastornado y empecé a fantasear con besar ese hombro descubierto, nunca había deseado algo tan simple de esa manera y nunca mas lo volví a hacer, mis ansias no eran solo sexuales, no era sentimiento burdo, basico y primitivo, pero aun así era algo imposible de definir, quería ese hombro, esos cabellos y esos ojos para mi, quería un titulo de propiedad sobre esa piel.
¿Pero que son los sueños de un hombre? ¿donde viven y donde mueren?, tal vez se van a hacer compañía a todos las ilusiones perdidas, tal vez caminen por un inmenso bulevar sin fin, donde caminan todas las aventuras que nunca se completaron, donde reposan aquellas ideas que nunca se realizaron, donde nos ven pasar las nubes de la nostalgia y el adiós.
Los sueños de un hombre se vestían de blanco y se apresuro a bajar al llegar a una parada, caminó directo a mi y yo no podía dejar de mirarla y entonces cuando pensé que iba a timbrar se paro delante de mi, se agacho y me beso.
Un beso inesperado, el beso regalado de una extraña, una caricia en mi cara y sentí el olor de su saliva, la textura de sus labios y el sabor de su lunar, sentí que si alguna vez ha existido un cielo, el se había materializado allí, en un bus ordinario, con un ángel vestido de blanco que se bajo en esa esquina.
Permanecí sentado en aquel solitario bus y no reaccione hasta cuadras después, aun faltaba para llegar a mi destino, pero decidí correr cuadras atrás en su búsqueda.
Hoy me he subido como muchas tardes cualquiera al mismo bus, a la misma hora, hoy me he bajado en el mismo lugar donde se bajó, hoy he caminado por calles vacías esperando encontrar a la dama del vestido blanco, incluso he buscado un beso parecido, he acariciado muchos hombros, pero nunca ha sido igual, porque en ese beso estaban todas las fantasías que ni siquiera yo sabia que tenia, aquellas que no existen en realidad porque nunca se pueden realizar.
¿En que terminan los sueños de un hombre?, me pregunte antes de dormir.
En simples palabras regaladas como aquel beso, en una historia sin moralejas y sin final, en un saco lleno de las promesas que nunca se cumplieron e ilusiones que nunca se realizaran.
22 oct 2008
Un Beso Regalado
Narró:
Jaime Diaz
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
3 comentarios:
Hola,¿que tal? soy una adicta a los cuentos y simplemente quería decirte que "Un Beso Regalado" me conmovió hasta lo mas profundo de mi ser, no solo porque me siento identificada con los sentimientos del protagonista, sino que tambien me gusto la forma en la que los describe. Simple y al mismo tiempo rebuscado.Pero me hubiera gustado que el final quedara abierto para asi poder soñar con que el amor a veces se encuentra. mis felicitaciones y agredecimientos. mucha suerte.
Es un buen ejemplo de las jugadas de la mente; nuestro principal dador de historias: nuestro cerebro.
Muy bueno como de costumbre don Turin.
Your blog keeps getting better and better! Your older articles are not as good as newer ones you have a lot more creativity and originality now keep it up!
Publicar un comentario