Este es probablemente el cuento mas aburrido del mundo, el mas normal.
Lo es porque es el cuento de un tipo normal, que hacia cosas normales. Tuvo una niñez normal y estudió cosas normales, consiguió un empleo normal y su desempeño fue normal, conoció una chica normal, tuvo un matrimonio normal y un par de hijos normales.
Con su esposa normal siempre tuvo sexo normal y compraron una casa normal y un carro normal como hacen las parejas normales, se endeudaron de manera normal y siempre pagaron de forma normal, pero con el tiempo pasó lo mas normal, su amor normal se acabó, sin embargo hicieron como todos los matrimonios normales: soportaron estoicamente el saber que viviran hasta que los separe una muerte normal.
Siguieron su vida normal y normalmente fue infiel, tuvieron las crisis de parejas normales, pero las superaron de manera normal, les pagaron a sus hijos una educación normal para convertirlos en gente normal, que encajaban de manera normal, en la sociedad normal.
Pero hubo una oportunidad de que este cuento no iba a ser aburrido y normal. No fue cuando se acostó con la secretaria, porque era una secretaria normal, si no un día que se despertó y se dio cuenta de lo normal que era su vida, soñó con miles de lagrimas y miles de sonrisas, soñó con vivir al borde del abismo, soñó con embarazar una cualquiera, con amanecer con una recien conocida, soñó con emprender una aventura a cualquier parte con solo las ganas y la actitud, soñó con cometer una estupidez y volverla a cometer, soñó con tener como unico objetivo en su vida el vivirla, soñó con no ser el ejemplo normal para personas normales.
Y como se había hecho tarde para ello, pensó en suicidarse y acabar de manera anormal su vida normal, pensó en una muerte histrionica en la que condensara el dolor, pensó en sorprender a todo el mundo, causar una impresión que hiciera que la normalidad de su vida fuera completamente olvidada y odiada.
Pero normalmente no lo hizo. Apartó el sueño primordial y mortal, prefiero morir 20 años despues en un ancianato normal, de una manera normal, con un entierro normal y olvidado, como con los muertos es normal.
Y este es el fin, les dije que iba a ser aburrido y normal. Pueden bostezar sin pena, como lo haría una persona normal.
(Aunque hay que decir que leyendolo de una manera anormal esto un cuento de terror y que probablemente esta noche yo no pueda dormir de manera normal).